No es extraño que el concepto del Loremo se base en un diseño atrevido. Sus medidas son: largo de 3.840 mm, ancho de 1.620 mm y alto de 1.100 mm.
El propio acceso al vehículo no es nada convencional.
El diseñador asegura que con un peso de 450 kg y un kilometraje anual de unos 20.000 km tan sólo se consumen 300 litros de nafta.
Monta un motor de 2 cilindros y lleva una transmisión de 5 velocidades; desarrolla una potencia de 15 kW / 20 HP que con 20 litros de combustible en el depósito le da una autonomía de unos 300 km.
La velocidad punta máxima es de 160 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 20 segundos. En cuanto a la seguridad incorpora estándares como el airbag, radio, aire acondicionado, entre otros.
Los modelos híbridos y los vehículos con pilas de hidrógeno tienen en su contra el peso excesivo del motor por lo que es difícil que puedan aportar mínimo consumo, aunque sea más ecológica la fuente de donde lo obtienen.
El concepto del Loremo LS no es nuevo: un pequeño motor de combustión interna y el mínimo peso y resistencia al aire.
Quizás el atrevimiento de esta empresa alemana debe valorarse por que sacude algunos preceptos inalterables de una industria que es la responsable de que ya haya más de 600 millones de automóviles por todo el planeta.