El nuevo Mazda CX-7 es un SUV de cinco plazas, que está orientado más a un uso por asfalto que para el campo.
Exteriormente se destaca por tener un parabrisas muy inclinado (66º) y unas prominentes defensas delanteras, con la característica doble parrilla delantera de los modelos de Mazda.
Las manijas de las puertas y el marco de las ventanillas son cromados. En la parte posterior tiene pilotos con carcasa transparente y una salida de escape a cada lado.
Sus medidas son: 4.675 mm de largo; 1.870 mm de ancho y 1.645 mm de alto. La capacidad del baúl es de 455 litros, con los asientos rebatibles llega a los 1.660 litros.
Trae un motor naftero de inyección directa y turbocompresor de 2,3 litros y eroga una potencia máxima de 258 Cv.
Acelera de 0 100 km/h en 8 segundos y desarrolla una velocidad final de 210 km/h. La caja de cambioes es manual de seis velocidades.
En su interior trae una pequeña pantalla en la parte superior del salpicadero para mostrar información relativa a la radio y al climatizador. Debajo de ésta y de las tres salidas centrales de ventilación se encuentra el sistema de sonido y, más abajo, los mandos de control del climatizador.
Entre el equipamiento de serie trae faros de xenón, conexión automática de luces y limpiaparabrisas, climatizador de una zona, asientos de piel, sistema de entrada y arranque sin llave, mandos para manejar el equipo de sonido (Bose Centerpoint con nueve altavoces) desde el volante y techo solar.
En cuanto a seguridad trae airbags frontales, laterales delanteros y de cortina para las dos filas de asientos (imagen), antibloqueo de frenos, control de tracción y control de estabilidad.
Tiene un sistema de tracción total conectable automáticamente mediante un acoplamiento de control eléctronico situado en el diferencial trasero.
La suspensión es independiente en las cuatro ruedas y los frenos de disco ventilados. Las llantas son de aluminio son de 18 pulgadas y calza neumáticos 235/60 R18.
