La marca Seat presentará en el Salón Internacional del Automóvil Frankfurt 2007 el Tribu, un concepto con formas y características básicas de un todoterreno.
Su frente se destaca por su gran capot con formas compactas y por una luna delantera que se prolonga a lo largo del techo del vehículo. Así, parabrisas y techo panorámico conforman una única pieza lo que le da una gran luminosidad al habitáculo.
En la parte trasera lo más llamativo es, sin duda, la aparente ausencia de los pilotos, que se encuentran camuflados tras el propio portón. Esto hace que sólo puedan verse cuando se iluminan al encender las luces de posición, los intermitentes o al accionar el freno.
En el interior, el Tribu se configura en cuatro plazas, siendo las delanteras como auténticos asientos de competición con cinturones de seguridad incorporados. Disponen además de circuitos de climatización independiente integrados.
Las plazas traseras, por su parte, que pueden plegarse para aumentar la capacidad del baúl, están separadas por un túnel central que puede servir como reposabrazos, como posavasos o bien, como un amplio hueco portaobjetos.
En el tablero saltan a la vista las cuatro pantallas TFT que, junto a dos relojes de cuentavuelta y velocímetro, ofrecen toda la información necesaria sobre el vehículo. En tres de dichas pantallas se puede ver la variación de los datos en función del modo de conducción elegido.
Lleva llantas de 20 pulgadas y calza neumáticos 255/50 que contribuyen a dar su caracterìstico aire deportivo.