Dos décadas después de la caída del muro de Berlín, la empresa alemana Herpa, planea relanzar el Trabant, un pequeño coche que causó furor en la Alemania comunista.
El nuevo Trabant, o nuevo Trabi, fue presentado en el Salón Internacional del Automóvil Frankfurt 2007, aunque a una escala de 1:10 (Herpa es un reconocido fabricante de autos en miniatura).
Producido como el modelo original de aquella época, traerá dos puertas, cuatro asientos y estará pintado en su clásico color azul cielo.
También lo llamaron "bujía con techo" debido a su simplicidad. Sin embargo, en la República Democrática Alemana esperaron durante años para poder comprar uno.
No tendrá las mismas dimensiones de su antecesor, ni la carrocería de cartón plastificado, sólo conservará el icónico diseño que le lanzó a la fama.
A pesar de su poco potente motor, este auto de trazos cuadriculados siempre ha sido recordado con cariño y ternura por todos aquellos que lo condujeron.
Según la demanda que tenga en el Salón, sería producido en serie a un valor que llegaría en el tope de gama a 50.000 euros por unidad.