Durante el mes de junio se comercializaron en Inglaterra 209.190 vehículos, una baja del 6,1% con respecto a igual mes de 2007.
En los primeros 6 meses del año, las ventas de automóviles y todoterrenos en el mercado británico se situaron en 1,24 millones de unidades, lo que significa una baja del 1,6% en relación con el mismo período del ejercicio precedente.
Por su parte, las ventas de automóviles diésel experimentaron un crecimiento del 4,5% en junio (89.470 unidades), de forma que la cuota de penetración de estos autos se elevó al 42,8%.
Según informaciones, esta desaceleración no es imprevista, pero apunta a un empeoramiento de la situación del mercado.
La presión de los precios, las preocupaciones medioambientales y los avances tecnológicos han llevado a los consumidores a comprar vehículos más eficientes.