La nueva apuesta de Citroën toma elementos de fórmulas ya probadas como lo es la plataforma de la nueva generación del C3, el tamaño reducido pero con mucho equipamiento, motorizaciones atractivas, un diseño agradable a la vista con líneas redondeadas como lo acostumbra la marca de los chevrones y por supuesto el anuncio de que será un competidor del Mini, lo que lo obliga a contar con mucha deportividad.
Cabe destacar que la denominación DS será una submarca de Citroën, y que se comercializará de manera independiente. Esta marca optará por mayores prestaciones de motor y un equipamiento más encaminado al lujo.
Este concepto comenzará su comercialización en 2009, mientras que otros dos modelos DS verán la luz en 2010.
Potencia, prestaciones y demás detalles serán presentados en el Salón de Ginebra, pero sin dudas ya es interesante este diseño y el crecimiento de la marca francesa.