El fabricante galo ha aprovechado el Salón de Ginebra 2009 para presentar varias de sus cartas fuertes, al facelift de la tercera generación del Clio y a la presentación de la Scénic III, se adiciona la variante más deseada de la gama Mégane, por supuesto me refiero a la versión que lleva las siglas RS.
Este nuevo Mégane RS estrena un totalmente nuevo propulsor de 2.0 litros, que gracias a un turbocompresor entrega 250 Cv desde las 5.500 rpm. Un detalle interesante es que la turbina es de alimentación doble por lo que el tiempo de respuesta se reduce.
El torque es de 350 Nm disponible a 3.000 giros, aunque el 80% se puede emplear desde apenas 1.900 vueltas. La transmisión es manual de seis cambios.
Habrá dos variantes de equipamiento, siendo la CUP la más elevada y que además incorporará una suspensión más deportiva y un diferencial de deslizamiento limitado.
Los cambios con respecto de la versión menos vitaminada se notan en ruedas, pintura, paragolpes y luces diurnas de LEDs.