No cabe duda que el Ford Fiesta es un auto vital para el futuro inmediato de la marca del óvalo azul. Los experimentados pilotos Marcus Grönholm, dos veces campeón del mundial de rallies, y Andreas Eriksson, cuatro veces campeón de rallies en Suecia, serán los encargados de efectuar el ascenso en la mítica competencia de Pikes Peak en su edición número 87.
Se trata de un Fiesta severamente modificado, por no decir que no guarda relación alguna con un modelo de producción salvo el diseño básico de la carrocería. Este Fiesta Olsbergs MSE entrega 800 CV.
Pikes Peak, también conocida como la carrera hacia las nubes, es la segunda carrera más vieja de EE.UU.