"El está contento porque ganó, por supuesto. Pero no dijo que quería volver a la F-1 y no creo que lo haga", luego de haber hablado con Briatore.
El italiano fue sancionado por la Federación Internacional del Automóvil (FIA) con exclusión de por vida de la categoría por haber ordenado a Piquet, en el Gran Premio de Singapur de 2008, que chocara deliberadamente su Renault contra el muro de defensa, según lo denunció el piloto brasileño.
"No está terminado del todo (el asunto). Sólo porque un maldito juez haya dicho lo que dijo, eso no hace la diferencia.Nada sucedió", apuntó Ecclestone, en directa referencia a las nuevas batallas legales que tendrá el caso.
"El tribunal dijo que estaba mal (el procedimiento), por lo que la FIA puede comenzar todo de nuevo con otra audiencia, y todo continuará. Eso es lo peor. Sería mejor si se reunieran en una mesa redonda y analizaran qué pueden hacer", agregó el dueño de la comercialización del circo automovilístico.
La FIA, que castigó a Briatore bajo la presidencia de Max Mosley, ahora reemplazado por Jean Todt, indicó que presentará una apelación al fallo absolutorio.
"La capacidad de la FIA de excluir a aquellos que intencionalmente pusieron en riesgo la vida de otros fue puesta en duda y en este momento la FIA está considerando cuidadosamente sus opciones de apelación", dijo la entidad.
Briatore, ni bien se conoció el falló, admitió que no estaba en sus planes regresar a la F-1.
El italiano, que fue director de Benetton y Renault y descubrió a los campeones Michael Schumacher y Fernando Alonso, es actualmente representante de varios pilotos como Alonso y el australiano Mark Webber.
"No hay razón por la que no pueda ser representante si él quiere. Pero sería difícil volver a su antiguo trabajo para alguien que ha hecho algo mal", opinó Ecclestone.
En tanto, Briatore avisó que planea armar acciones legales contra Piquet, que fue quien reveló públicamente la acción que derivó en la sanción para el dirigente.
"Muy probablemente emprenderé acciones legales contra él. No olvidaré el daño que me hizo en un día", dijo Briatore.
"¿Champagne? No, abrí una Coca Cola porque estoy a dieta. Llevo tres meses comiendo verduras", dijo Briatore, que será padre dentro de tres meses, a los 60 años.
"Todavía no tenemos nombre para el bebe... pero lo que es seguro es que no se llamará Max", completó irónico y jocoso, en punzante embestida a Mosley, al tiempo que anheló mejorar su relación con la FIA, a partir del desembarco de Jean Todt.
"Conozco a Jean desde hace años y puedo apostar por su honestidad", apuntó Briatore.