Las garantías sobre vehículos nuevos o seminuevos ofrecidas por las marcas tienen a la Comisión Europea con la mosca detrás de la oreja.
Bruselas ha pasado la lupa sobre el mercado del automóvil y ha concluido que, si bien la venta de vehículos muestra un "fiero" nivel de competencia, no se puede decir lo mismo cuando se trata del negocio de reparación y mantenimiento de los vehículos.
"No hay razón para tratar la venta de automóviles de manera distinta a cualquier otro sector. Sin embargo, hemos encontrado que la posventa es más propenso a sufrir problemas de competencia. Por esta razón, propondremos que sea regulado con reglas específicas", explicò un vocero de ese organismo.
También, otra de las propuestas que estudian es que los fabricantes no puedan "rechazar la garantía" de un vehículo reparado en un taller ajeno a la red oficial, con lo que se quiere "abrir el mercado a empresas independiente".
La fidelización (obligada) de los clientes obtenida a través de las garantías es la parte del león en el negocio de muchos distribuidores de vehículos. De hecho, el 45% de los talleres pertenecen a redes oficiales de marcas.
Pero incluso aquellos que tienen la clientela más asegurada sufren la crisis. Durante 2009, los conductores han reducido drásticamente sus gastos en reparaciones y repuestos.
Y la caída de ventas de coches nuevos desde 2008 también reduce el negocio de las garantías. Según la consultora Accenture, el mercado de la posventa sufrirá en 2010 una caída del 25%.
Los problemas a los que se refiere Bruselas están relacionados con las piezas y componentes con que se efectúan las reparaciones.
Numerosos fabricantes limitan las garantías de sus vehículos al uso de piezas específicas manipuladas únicamente en su red de talleres oficiales lo que, en opinión de la UE, limita la competencia a los negocios independientes y, a la larga, las posibilidades del propio consumidor.
Se espera para el mes de junio, el lanzamiento de un nuevo marco comunitario para el mercado del automóvil.
Este marco pondrá fin a las exenciones por categoría para los distribuidores pero, según lo avanzado, impondrá reglas específicas para la posventa, de manera que los operadores con una cuota de mercado superior al 30% vean limitada su capacidad.