Invitados por Fiat Argentina, viajamos a Praia do Forte, Bahía (Brasil) para asistir al lanzamiento regional del nuevo Fiat Uno.
En los 3 días que duro el viaje (entre convenciones, presentación de producto, lluvia y un poco de sol), pudimos realizar el test de una de la versiones que llegará al país entre agosto y septiembre que es el Way con motor 1.4 litros. La otra versión que se comercializará en el país es la Attractive 1.4.
En Brasil se ofrecerán las siguientes versiones: Uno Vivace 1.0; Attractive 1.0 y 1.4 litros y la versión aventurera Way con motor 1.0 y 1.4. El nuevo Uno convivirá con el vigente tanto en Brasil como en Argentina.
Solo se dieron a conocer los precios con que se comercializaran en Brasil. Comienzan en los 25.550 hasta los 31.870 reales.
Este nuevo Uno es más grande y tiene una fuerte semejanza con el actual Panda europeo, manteniendo esa imagen cuadrada que despertó admiración allá por los años ochenta. Estamos hablando de un auto que sale a la conquista del segmento A/B.
Su exterior trae plásticos negros en la trompa, pasarruedas y baguetas, portaequipajes y calcos peersonalizables (tipo tatuaje) como tiene el Stepway en Brasil, aunque no es nuestro mercado.
Seguiendo la moda de los "techo alto" que pega fuerte en Sudamérica, la marca italiana no está dispuesta a quedarse afuera.
El nuevo Uno utiliza una plataforma derivada de la del Palio, pero con un 82 por ciento de nuevos componentes. Tiene casi la misma distancia entre ejes, pero gana en trochas, sobre todo en la parte trasera.
También cambia la suspensión, algo más firme que la que conocemos en el Palio y que contiene mejor al Uno tanto en las frenadas- evitando los cabeceos- como en las curvas veloces, donde pese a mostrar inclinaciones por su centro de gravedad más alto, dobla con firmeza.
La cáscara también cambió por completo. Los guiños al Panda pasan por el formato general y sobre todo por la resolución del sector posterior, pero carece de una tercera ventanilla (lo que reduce un poco la visibilidad), y a su vez gana musculatura gracias a unos amplios pasarruedas y la bagueta integrada a la carrocería.
Lo más curioso es la falsa entrada de aire en la trompa únicamente del lado izquierdo, otro guiño al Panda, pero esta vez al original de 1980.
Ese "triple" detalle se repite en el contorno que encierra las letras Uno en el logo. No sabemos si como homenaje o como ahorro, la cerradura no está integrada a la manija.
En su interior, se respira un aire moderno, austero, pero bien terminado y con varias reminiscencias al Fiat 500, como por ejemplo las teclas levantavidrios, ubicadas incómodamente en la consola central (las de atrás siempre son manuales), o el velocímetro dominado por una amplia esfera.
Tiene un tablero práctico pero al que lleva tiempo acostumbrarse, sobre todo para ver el cuentavueltas (algo escondido) y el sector digital, con mucha información en poco espacio.
Una novedad es que la parte alta de la plancha (que aúna las salidas circulares del aire y la radio con MP3) puede personalizarse con distintos motivos.
La posición de manejo es algo más alta que la de un Uno actual o un Palio, y dentro del paquete de opcionales se pueden elegir el volante y la butaca del conductor regulable en altura. Como hay lugar a lo alto, en el techo hay un portaobjetos secundario para vigilar a los más chicos, por ejemplo.
Atrás es donde se nota la mayor evolución, porque con un tamaño muy similar al del Palio, el nuevo Uno tiene poco y nada que envidiar al espacio de un Agile o un Fox. Trae tres apoyacabezas.
La capacidad del baúl es de 280 dm3 y puede ser abierto por medio de la llave o a través del comando interno típico de Fiat.
El motor es naftero de 1.368 cm3, 4 cilindros y 8 válvulas de inyección electrónica multipunto.
Eroga una potencia máxima de 85 CV a 5.750 rpm. Desarrolla una velocidad máxima de 165 km/h y su aceleración de 0 a 100 km/h es de 11,8 segundos. Lleva una caja de cambios de 5 marchas.
Sus medidas son: largo de 3.770 mm; ancho de 1.640 mm y alto de 1.490 mm. La distancia entre ejes es de 2.380 mm.
Con respecto al equipamiento, viene con dirección hidraúlica; aire acondicionado + parabrisas degradé; airbags para el conductor y el pasajero; cinturones de seguridad delanteros con regulación en altura y laterales traseros retráctiles de tres puntos.
Además, tacómetro; comando interno de apertura de baúl y de la tapa de tanque de combustible; ABS; faros antiniebla; llantas de aleación; radio CD/MP3 player + Bluetooth + Viva Voz + USB + predisposición para iPod; consola de techo; consola central larga y espejo de cortesía del lado del conductor (sin luz).
También, limpialuneta con intermitencia; porta lentes; retrovisores externos con comando interno mecánico; agarraderas de techo traseras; vidrio trasero tèrmico temporizado y volante con regulación de altura.
Revestimiento negro en los parantes de las puertas; paragolpes, molduras de las puertas y espejos retrovisores pintados; estribo delantero y trasero, neumáticos 175/65 R14, apoya pié y friso laterales en las puertas.
Conocé todos los datos técnicos, equipamiento y colores del Nuevo Uno en Argentina
Nacimiento
Entre diseñadores e ingenieros, 600 profesionales de Fiat contabilizaron cerca de un millón de horas trabajadas para el proyecto.
Se construyeron 99 prototipos, y más de 88 para la verificación de los procesos de montaje.
Entre preserie y preproducción, el número de vehículos montados fue de 239. Es decir que Fiat produjo 426 unidades del nuevo Fiat Uno, englobando todas las versiones en desarrollo para Brasil y los mercados latinoamericanos.
Aún 95 unidades recorren 2 millones de kilómetros, totalizando aproximadamente 6,5 millones de kilómetros de test para que el nuevo Fiat Uno pueda llegar a los concesionarios y a los garages de los clientes.