Los preparadores alemanes son bien conocidos en el mundo del motor por la gran variedad de empresas que se dedican a personalizar autos. Gracias a ellos, conocemos las versiones más extremas, tanto de modelos deportivos como de aquellos que jamás hubiéramos esperado que sean tuneados.
Enco es uno de esos tantos preparadores que hacen las delicias de los fanáticos de la velocidad, aunque en honor a la verdad, no es uno de los más reconocidos.
Sin embargo y a pesar de su anonimato, la empresa sorprende con una espectacular versión del Porsche Cayenne Turbo, denominada para la ocasión Gladiador 700 GT Biturbo.
Si bien el Cayenne recibió destacadas modificaciones exteriores, el alma del auto está en el motor, porque es ahí donde se centró el trabajo de Enco y lo que le da la tonalidad al modelo.
La incorporación de un turbo más grande, un sistema de escape deportivo desarrollado por Enco con múltiple y conversor catalítico deportivos y numerosas mejoras hacen que el motor entregue unos generosos 700 CV y un par motor de 850 Nm.
Aunque el peso del auto es de 2.5 toneladas, este no es impedimento para que el "gladiador" acelere de 0 a 100 en solo 4.5 segundos. La velocidad máxima alcanzada por esta bestia alemana es de 290 Km/h.
Enco equipó al Gladiador 700 GT Biturbo con frenos de alto rendimiento que utilizan un disco de 410 mm x 36 y caliper de doce pistones en el eje delantero, mientras que los traseros miden 380 mm x 32 y utilizan pinzas de cuatro pistones.
Claro que para montar estos sistemas se necesita una gran cantidad de espacio. Por eso, las llantas son de aleación marca Enco con neumáticos Dunlop Sport Maxx GT 315/25R23. Una modulo electrónico para la suspensión estándar del Cayenne reduce la altura del auto en 50 mm.
En el exterior las modificaciones, dominan la silueta del Gladiador. Spoiler delantero, capot de fibra de carbono, faldones laterales, spoiler de techo, faldón trasero con difusor integrado, guardabarros ensanchados con ventilación para las ruedas delanteras y traseras y pintura bi tono en rojo Bordeaux y negro.
En el interior se encuentran butacas deportivas de fibra de carbono (del 911 GT3) cubiertas en cuero y Alcántara en rojo y negro. Esta tonalidad se extiende por el salpicadero y la consola central, poniendo en armiño el cuerpo y el alma del auto.
