Al igual que un Bugatti Veyron Super Sport que puede alcanzar hasta los $2.3 millones de dólares, la compañía Luzzo Bespoke Ltd. lanzó al mercado un escritorio de trabajo inspirado en la marca francesa pero a un precio nada popular de 240.000 dólares.
Aunque no es producto patentado por Bugatti, la firma Luzzo hizo un gran trabajo para hacer un escritorio moderno y realmente atractivo como cualquiera de los vehículos de la marca.
Este peculiar escritorio es completamente de aluminio. Está pintado en ciertas partes de color azul para emular el Bugatti Type 35. Asimismo cuenta gabinetes de cierre automático y monitor retráctil. En cuanto a la computadora es una iMac de aluminio que combina perfectamente con los tonos del mueble.
Por parte al igual que el exclusivo Bugatti sólo se construirán 10 escritorios de trabajo cada uno con una placa numerada.