La cuarta edición de La Carrera del Año del Top Race en Buenos Aires no solo tuvo un marco imponente de público (más de 60.000 personas), sino que fue por demás entretenida con una intensa lucha por la victoria, maniobras polémicas, un accidente en la recta principal y un ganador que se definió en la última vuelta. El que se quedó con la gloria fue Guido Falaschi (Oil Competición), quien así consiguió su segundo triunfo de la temporada tras la victoria en Oberá.
La final comenzó con Norberto Fontana (Tauro Sport Team) al frente del pelotón después de ganar el Súper Sprint. En las primeras vueltas tuvo que aguantar a Christian Ledesma (Sportteam), quien intentó superarlo por afuera en la Horquilla. Hubo un roce entre ambos y salieron más lento que el resto. Mientras que el marplatense perdió varios puestos, Fontanita cedió posiciones ante Falaschi y Agustín Canapino (Sportteam).
Con El Príncipe cortado en la punta, la lucha estuvo por el segundo lugar entre los dos coterráneos. Ambos entraron a la par en el curvón Salotto, pero un toque de Fontana a Canapino terminó con el campeón despistándose.
Así, Omar Martínez (Schick Racing) y Juan Bautista DeBenedictis (Tauro Guidi Team) se convirtieron en los nuevos escoltas del ganador de la Copa América 2010. Pero aún faltaban más sorpresas. En la vuelta 11, José María López (Oil Competición) se despistó en Ascari y se quedó sin chances de entrar a la Etapa que define el título. Y dos giros más tarde, DeBenedictis se fue al pasto.
Mientras que en el giro 15 sucedió el gran susto del domingo: el toque de Néstor Girolami (RV Racing Sport) a Rafael Morgenstern (Mitsubishi Racing), que terminó con ambos autos pegándose violentamente contra el guard-rail de la recta principal. “Girolami no tiene códigos… Cualquiera sabe que un toque en ese lugar termina en un accidente”, dijo el misionero.
El auto de seguridad que neutralizó la prueba por este incidente le permitió a Martínez descontarle a Falaschi. Con pocas vueltas por disputarse, el entrerriano fue a todo o nada y, faltando tres giros, se quedó con el primer lugar. Sin embargo, El Príncipe no se rindió y fue al ataque. Con otra gran maniobra superó a su rival para quedarse con la victoria en el coliseo.
La Carrera del Año, otra vez, no defraudó.
Fuente: CORSA