Quizá esta es una de las preguntas más frecuentes que te has llegado hacer. Tal vez te has imaginado que mientras manejás tu auto, podés mover fácilmente la palanca de cambios hacia la posición “R”. Probablemente considerarías hacerlo sólo por curiosidad, aunque realmente NO lo ejecutarías, porque pensás que si lo intentás, ocasionarías que la transmisión explote o algo parecido, así que al final te quedás con la duda.
El cambio de marcha atrás en cualquier auto con transmisión manual es una increíble pieza de maquinaria. En ella hay un eje que obtiene su fuerza del motor y además tiene dientes, los cuales son usados para ir en reversa. Hay otra manivela que gira las ruedas, también posee incisivos y se utiliza para moverse marcha atrás. Al meter el cambio, un engrane literalmente es empujado en medio de las dos barras para accionar el par de piezas dentadas. En otras palabras, la parte desliza sus muescas dentro de los incisivos de los dos ejes y los embraga.
Así que la respuesta a la pregunta es un tanto simple. Si trataras de meter marcha atrás mientas vas manejando, el engrane que se tiene que deslizar en medios de las dos piezas no podrá hacerlo ya que ambas estarán girando -una de ellas de hecho está rotando rápidamente en dirección opuesta. Lo que escucharás es un zumbido –vibración- bastante desagradable al instante que los dientes chocan unos con otros. No obstante, no hay manera que la parte embrague estando las otras en movimiento, por lo que nada pasará. La transmisión no explotará, ni el auto se detendrá de repente, ni se irá hacia atrás en contra del tránsito.
La única manera en que podés accionar el cambio de marcha atrás en un auto, es cuando éste está completamente detenido.