El pésimo arranque que tuvo en la temporada obligó a cambiar los planes de Felipe Massa. Luego de su abandono en Australia y del 15º puesto en Malasia comenzó a sonar cada vez más fuerte la posibilidad de que el mexicano Sergio Pérez, que viene de un gran segundo lugar en Sepang e integra el programa de desarrollo de jóvenes pilotos de Ferrari, lo reemplace a corto plazo en la Rossa.
Por eso, el paulista dejó de lado la posibilidad de tomarse unos días de descanso en Brasil y viajó directamente a Maranello para reunirse con la cúpula del Cavallino. Luca di Montezemolo, presidente de la marca, le dio una chance más a Felipe: “Tenemos una gran confianza en Massa y en estos momentos no veo muchos pilotos por ahí”.
Massa acumula 49 Grandes Premios sin triunfos, desde aquel lejano éxito que consiguió en Brasil 2008, el día que cruzó la meta como campeón, pero todo se frustró cuando Lewis Hamilton superó a Timo Glock en la última curva y le arrebató la corona. En el medio sufrió el tremendo accidente en el GP de Hungría de 2009, cuando un resorte de suspensión del Brawn GP de Rubens Barrichello se desprendió y golpeó la cara de Felipe durante la clasificación y, por las lesiones sufridas, se perdió el resto de la temporada.
La posición de Massa en Ferrari es cada vez más precaria. Por ahora recibió el apoyo de los popes del equipo, pero los plazos se le acaban. Para colmo su compañero Fernando Alonso viene de ganar en Malasia, a pesar de que la F2012 es claramente inferior a los McLaren y Red Bull. El Gran Premio de China, que se disputará el 15/4, será una prueba de fuego para Felipe.
Fuente: CORSA
