La arena exige una técnica de conducción específica, que una vez dominada, la diversión al volante está garantizada. La conducción por las dunas o el desierto es de las actividades más divertidas que se pueden hacer hacer a bordo de un vehículo y en consecuencia, de las que mas enganchan a todo buen amante de los deportes extremos y el 4x4.
Si vas a manejar una 4x4 sobre arena tenés que saber que:
- Lo primero que debemos hacer es bajar la presión de los neumáticos, podemos empezar con un 30 o un 40% del inflado recomendado por el fabricante.
- Pasá la menor cantidad de cambios, siempre de forma rápida y precisa ya que la arena tiene un gran poder de frenado.
- En caso de quedar varado, la eslinga y un tirón por parte otro vehículo desde un terreno mas compacto es suficiente para liberar nuestro vehículo.
- Un error muy común es insistir con el acelerador una vez que el 4x4 se empieza a hundir en la arena, lo mejor es dar marcha atrás e intentar nuevamente.
- Si tenemos que afrontar una duna, lo mejor es ver que hay detrás, en ocasiones hay desniveles muy pronunciados y verticales.
- Las dunas se deben atacar de frente, nunca en diagonal ya que podés volcar, pero con precaución de no salir volando en la cresta.