Debido a que los bajos precios del combustible (a nivel global, claro) han disminuido la demanda de vehículos alternativos, Toyota se ha visto en la necesidad de reducir el objetivo de ventas del Prius.
Esta situación ha obligado a la firma nipona disminuir la meta anual a 350.000 unidades, esto es 50.000 vehículos menos que en 2014. Tan solo en el mercado estadounidense, las ventas del Prius han caído un 14.9 % al sólo registrar 107.845 unidades en el periodo de enero a noviembre.
Indudablemente, otro de los factores que ha estancado las ventas del Prius es que muchos consumidores están esperando la llegada de la cuarta generación, misma que será lanzada en Estados Unidos el próximo enero.
Aun con esta situación, Toyota sigue dominado el segmento de los autos híbridos no sólo en Estados Unidos, sino a nivel mundial. Al día de hoy existen más de cuatro millones de Prius rodando por las calles.