Uno de los mayores desafíos de las marcas de lujo es lograr un buen desempeño en las capas más jóvenes de la población. Por eso, el anunció de Torsten Müller-Ötvös, CEO de Rolls-Royce, debe ser interpretado como una gran noticia para la casa británica. Según el ejecutivo, la edad promedio de los clientes se sitúa en los 45 años, un descenso de 10 años desde la última medición, que situaba el cociente en los 56 años.
Es última cifra colocaba a Rolls-Royce por arriba de la edad promedio de BMW, Buick, Cadillac y Mercedes-Benz, pero luego de esta nueva medición, al día de hoy Rolls-Royce logró quedar abajo de todas ellas. Buick hoy promedia 59 años, Bentley y Cadillac 52, Mercedes 51 y BMW 50. De acuerdo con Müller-Ötvös, la razón por la que disminuyó la edad promedio de sus compradores de Rolls-Royce tiene que ver con la forma en que están acumulando su riqueza haciendo plata: bienes raíces, ingeniería, entretenimiento, entre otros.
Un par de datos más a destacar es que la media de Rolls-Royce está por debajo de la edad promedio de los compradores de autos en general, que es de de 52 años, y de los clientes de autos de lujo, que es de 50 años.