Viajamos a Atlanta, Georgia (EE.UU.) para conocer de primera mano un modelo importante para Chevrolet, se trata de la nueva Blazer, que será fabricada en México, precisamente en la planta de Ramos Arizpe Coahuila.
Blazer, además de ser un nombre emblemático, ha sido un modelo diferenciador de la gama Chevrolet, ya que en sus inicios por allá de los año setenta se atrevió a hacer propuestas divertidas y funcionales, por ejemplo una pick-up con techo completamente removible y muchas capacidades 4X4. Con el paso de los años la Blazer se fue refinando, y pasó de ser una versión extrema de una pick-up a un vehículo utilitario con mayor orientación al transporte humano que al de carga y así se convirtió en una SUV mediana.
Ahora, General Motors decide revivir el nombre Blazer (sin el Trail) y nos presenta un producto completamente nuevo, con una apariencia agresiva en un vehículo con denominación SUV/Crossover, de dos filas de asientos para cinco pasajeros.
Durante la presentación estática conocimos dos opciones de equipamiento, la más agresiva visualmente es la denominada RS con tintes deportivos dados por acentos negros y llantas grandes que nos recuerdan al Camaro, y la versión Premier que está enfocada más a la elegancia y a los toques de cromo.
Ninguna tiene las pretensiones agresivas y off-road que sus antecesoras tenían, ahora está enfocada a un mercado de vehículos altos, amplios y confortables, pero 100% pensados para uso en pavimento. Sin embargo, las dos versiones estaban equipadas con sistemas de tracción integral (AWD).
Dos motorizaciones disponibles habrá en la nueva Blazer: una de cuatro cilindros de 2.5 litros que entrega 193 CV de fuerza y un torque de 255 Nm. La segunda motorización es un V6 de 3.6 litros que entrega 305 CV y 365 Nm. Ambos motores estarán acoplados a una transmisión automática convencional de nueve velocidades.
Como lo comentamos al inicio de esta nota, la Blazer estará disponible para el hemisferio norte recién en 2019, y no sabemos si su presentación en sociedad en EE.UU. será en el próximo Salon de Los Angeles, (a celebrarse el último trimestre del 2018) o en el Salón de Detróit que se llevará a cabo en el primer mes del 2019, en donde seguramente conoceremos las versiones finales de producción.
Los modelos que vimos eran de preproducción, pero ya con los detalles de equipamientos y materiales bien definidos, (y dentro de los poco que pudimos conocer) descubrimos que tiene las tecnologías a bordo que el cliente geek exige, por ejemplo sistema de carga por inducción para teléfonos, tablero virtual, muchos conectores USB y sistema OnStar.
Sobre el arribo a nuestro país aun no hay una fecha definida, pero fabricándose en México podemos fantasear con tenerla en nuestras calles.