Por fuera, parece un viejo y oxidado auto, pero en realidad este Mercury Coupé 1949 es mucho más. En vez de tener un V8 restaurado o moderno bajo el capot, esta coupé recurre a un complejo sistema eléctrico no solo para moverse, sino también para convertirse en un auténtico y ecológico hot rot.
Por fuera, esta creación de Icon Derelict luce una extravagante carrocería, donde predomina el óxido. Así a primera impresión parece una chatarra sobre ruedas, pero de ahí en más estás frente a un maestro del engaño, ya que este auto ha sido modernizado a un punto inimaginable.
El interior cuenta con unas capas extra de aislante acústico, al mismo tiempo que el tablero, paneles de puertas, y tapizados son nuevos. Por cierto, también se añade un sistema de aire acondicionado, así como esquemas de suspensiones y frenos más modernos.
Bajo el capot, se encuentra un V8 firmado por Icon, que... es falso, ya que en realidad recurre a un motor eléctrico capaz de entregar 400 CV y 637 Nm de torque, mportado directamente desde un Tesla Model S junto al paquete de baterías Panasonic de 85 kWh. Con esta potencia, este Mercury es capaz de alcanzar los 193 km/h de velocidad máxima. Mientras que la autonomía es de entre 240 y 320 km y puede recargarse a través de un conector CHAdeMO o con un supergargador Tesla... una maravilla de la ingeniería.