La Fórmula 1 ha sido, desde su inicio, el laboratorio de pruebas de varias marcas para la creación de vehículos para calles. Ahora, McLaren y su deprtamento Applied Technologies se lanzó a imaginar al Gran Circo, pero en 2050. Este concepto, denominado “Future Grand Prix”, explican cómo la Inteligencia Artificial, la tecnología de la conducción autónoma, el desarrollo de la economía y otros aspectos harán que la F1 evolucione de manera exponencial.
Para obtener una base sólida y argumentos del mismo calibre, el equipo de McLaren realizó varias investigaciones en todos los frentes. Así, se cubrió desde política sobre objetivos de emisiones, electrificación, hasta encuestas con los fanáticos y los análisis de las respuestas que dieron.
Los resultados
El monoplaza del futuro será eléctrico y contaría con una batería plegable de alta densidad. Su aerodinámica será activa, por lo que cambiaría según la carrocería lo necesite y tendrá una autonomía superior a los 500 km. Habrá un asistente de inteligencia artificial y llantas que se repararían solas ante los pinchazos.
En cuanto a los trajes de los pilotos, se concluyó que será un overol con protección reforzada para las altas velocidades. Además, temas como las emociones del piloto y su rendimiento físico se verán reflejados en el monoplaza.
Por otro lado, los circuitos de los Grandes Premios serán más largos, anchos, con estaciones de recarga y habrán pistas que se adecuarán a las condiciones de climas extremos, así como zonas de oscurecimiento, sin comunicación para el piloto, ni ayuda de la Inteligencia Artificial.
La visión increíble de McLaren abre los caminos para que haya una primera etapa de discusión y con el tiempo, de prueba/error, ajustes y finalmente, ejecución.