Manejar rápido no sólo se trata de poner el pie en el acelerador a fondo. Un manejo veloz no solamente se trata de velocidad, sino también consiste de mucha precisión en manos y pies, además de una gran concentración y una visión sublime. Pero como en todo, un manejo rápido requiere de mucha práctica con el objetivo de ir mejorando constantemente para refinar nuestras aptitudes y evitar en lo absoluto malos hábitos.
Sin duda estos cinco consejos son más que útiles para manejar rápido y bien:
Suavemente
Los movimientos bruscos en el volante, así como tratar los frenos y el acelerador de forma brusca no son recomendables. Al manejar rápido se debe hacer todo lo contrario, debemos hacer movimientos suaves. Hay que aclarar que esto significa que seamos lentos, sino más bien hay que ser dóciles. Siempre hay que tener en mente esto: suavidad es más rápidez.
Observar a lo lejos
En otras palabras, mirar a donde quiere ir y tu cerebro le dirá a sus brazos dónde colocar el volante. Es raro, y podés tardar un poco en acostumbrarse si nunca lo hiciste, pero funciona. Mirá hacia dónde querés que el auto te siga.
Manos al volante
Ya sea lento o rápido, siempre hay que poner las manos al volante de manera cómoda, a las "nueve y cuarto". Esto te permite tener un mejor control y así poder girar más fácil. Además, si el airbag se activa, será difícil que este dispositivo golpee las extremidades.
Frenar a tiempo
Al manejar rápido, lo mejor es no frenar de manera brusca al llegar a una curva. Esto no quiere decir que se necesite presionar los frenos en el último segundo, ya que eso podría hacer que se pierda el control si la transferencia de peso es muy súbita. Lo que se trata de decir es que no tiene que preocuparse por frenar durante mucho tiempo. Tal vez uno o dos segundos son suficientes. Cuanto más tiempo pueda mantener la velocidad en la curva, más rápido podrá ir. El frenado adecuado tomará un poco de práctica, pero una vez dominado, no se perderá tiempo en cada curva.
Aprender el camino
Si conocés la ruta o pista en la que está manejando, podés recorrerla mejor. Sabrá cuándo acelerar y disminuir la velocidad durante el mejor tiempo posible. Si podés, caminá antes por la pista.