La buena visibilidad es igual a cero accidentes y los espejos retrovisores no son suficientes para alcanzarla. Lo que alcanzás a ver sólo con el retrovisor te informa acerca del tráfico que viene detrás tuyo, pero no te permite ver los vehículos a tu derecha e izquierda hasta que los tenés demasiado cerca.
Eliminá los riesgos al cambiar de carril, girando los espejos laterales de la siguiente manera para reducir los puntos ciegos:
Posición normal de los espejos laterales: podés ver el lateral de tu auto.
Nueva posición del retrovisor: podés ver la calle, no el lateral de tu auto. Esta posición disminuye los puntos ciegos y los demás vehículos permanecen a la vista por más tiempo.
Probablemente te tome algún tiempo modificar tus hábitos y acostumbrarte a la nueva posición de los espejos. Sé constante y serás recompensada con una mejor visibilidad al manejar, lo cual optimizará tu seguridad y la de quienes viajen con vos.
Cinco razones para modificar la posición de tus espejos.
1• No vas a necesitar mirar tan seguido por encima de tu hombro (aunque no sea mala idea hacerlo).
2• Sólo vas a necesitar una breve mirada a tu espejo para ver el punto ciego (a velocidad de autopista, girar la cabeza significa desplazarse 30 m sin ver lo que está adelante).
3• Mirar el espejo te permite ver la escena que tenés adelante.
4• Los puntos ciegos pueden ser incluidos en tu escaneo visual.
5• En las noches, las luces no te encandilarán a través de los espejos.
Fuente: Mujeres al volante