La eficiencia aerodinámica es la clave para mejorar el desempeño de un vehículo, ya sea para aumentar su velocidad u optimizar su consumo. Por esta razón, los fabricantes automotrices (especialmente los de superdeportivos) están constantemente evolucionando en la aerodinámica de sus productos, cerrando huecos entre los paneles, desarrollando auxiliares aerodinámicos adaptativos e incluso eliminando accesorios superfluos.
Ejemplo de lo esto es el caso de McLaren, que desea remover los limpiaparabrisas por una solución de alta tecnología. La idea del fabricante es usar un sistema transductor ultrasónico de alta frecuencia, similar a los usados en los aviones caza de última generación cuando vuelan a baja velocidad, para limpiar la superficie del parabrisas y con ello eliminar la tradicional tecnología del arrastre del agua con una plancha de goma, con la consecuente reducción de peso del motor que lo acciona.
La idea es buena y no dudamos que McLaren lo lleve a producción, sin embargo todavía falta que lo aprueben los diversos organismos gubernamentales alrededor del mundo, lo cual no será fácil ya que los limpiaparabrisas son algo fundamental para la seguridad integral de cualquier vehículo como de sus pasajeros, así que mejor para McLaren que funcione bien, sino nos perderíamos de esta evolución en nuestros parabrisas.