Durante su visita a la construcción de la planta automotriz de Nissan en Resende, en el estado de Río de Janeiro, Carlos Ghosn, Presidente y CEO de Nissan Motor Co., Ltd., anunció que el complejo industrial también incluirá una planta de motores, que tiene previsto iniciar operaciones en 2014 con una capacidad de producción de hasta 200.000 motores al año.
Nissan invertirá 60 millones de dólares en la construcción de la planta de motores que generará aproximadamente 200 empleos directos. La unidad industrial usará un edificio adyacente a la planta de vehículos ya existente y comenzará sus actividades con la producción del motor flex de 1.6-litros 16V I-4, con 111 caballos de fuerza y 147 Nm de torque – al usar etanol –uno de los más eficientes en el mercado brasileño.
“La planta de motores en Resende es un importante pilar para fortalecer nuestra presencia en Brasil y una prueba más de nuestra confianza en el potencial del mercado brasileño. La planta se anexa a nuestro complejo industrial e incrementa nuestra competitividad para alcanzar nuestra meta de ganar cinco por ciento de la participación de mercado y ser la primera compañía japonesa en términos de participación en Brasil”, aseguró Ghosn.
El motor flex-fuel de 1.6-litros 16V de Nissan equipará a los automóviles producidos por la compañía en Brasil. Como ya se ha realizado con los empleados de la planta de vehículos – que está en su fase final de construcción – la compañía está desarrollando un plan completo de entrenamiento para empleados de la planta de motores.
La producción local de motores hace que el proyecto del complejo industrial de Nissan en Resende sea un centro completo. Con una inversión total de 1.500 millones de dólares, la unidad industrial de Nissan será una de las más sustentables del mundo y dará origen a dos automóviles brasileños modelo 2014: Nissan March y Nissan Versa.