La F1 es un deporte tan técnico y tecnológico que nos encanta ver cuando un piloto muestra algo de humanidad detrás del volante. El mejor ejemplo es cuando festeja su victoria dejando grandes nubes de humo y marcas en forma de aro (donuts) en el asfalto, mientras hace trompos con su bólido. Por esto Vettel fue multado en 2013, pero este año estará permitido para deleite de la tribuna.
En 2014, el máximo órgano regulador del automovilismo, la FIA, decidió permitir este tipo de festejos, pero puso algunas condiciones que parecen lógicas, debe hacerlo el piloto ganador, solo al final de la carrera, sin poner en peligro a nadie, sin retrasar la ceremonia de premiación y tiene que llevar el auto “entro” al parque cerrado.
Si bien esto no hace a la carrera en sí, podría agregar espectáculo y además, serviría para demostrar que los nuevos motores turbo de apenas 1.6 L tienen la potencia necesaria para que la F1 siga siendo la categoría máxima del automovilismo.
La duda es la siguiente, viendo lo mal que arrancaron los Red Bull los ensayos de 2014, ¿podrá Vettel realizar varias veces su festejo durante este año?