Tesla es un fabricante de lujosos autos 100% eléctricos que está dando mucho que hablar. Primero lanzó el bello Model S y está creando una red de Supercargadores en EE.UU. que ya permite a sus usuarios atravesar el país sin gastar un dólar en electricidad. Ahora, ataca al otro punto débil, el de las baterías y sus altos costos.
Básicamente, Tesla está planeando invertir junto a sus socios unos 5.000 millones de dólares en una nueva mega fábrica (denominada Gigafábrica) de baterías de iones de litio con el objetivo de hacer realmente masivo al auto eléctrico. El proyecto es serio ya que planean producir 500.000 baterías para 2020, más de lo que se produjo alrededor del planeta en 2013.
Los números antes expresados indican que la economía de escala sería tan grande como para poder vender baterías para autos eléctricos a precios muy competitivos. Inclusive mucho antes de llegar a esa cifra, Tesla espera bajar en un 30% el costo del kWh (kiloWatt-hora) solo en el primer año de producción.
Suponemos que los Tesla seguirán siendo los autos premium del mundo eléctrico, pero con esta Gigafábrica es de esperar que puedan ofrecer modelos más económicos, o proveer a otras automotrices para volver finalmente competitivos a los precios de los vehículos alimentados por baterías.