La Indy 500 de 2015 será recordada por la estrategia, gran manejo e inteligencia para atacar del experimentado piloto bogotano Juan Pablo Montoya, quien literalmente voló en el óvalo del Indianápolis Motor Speedway.
En la Edición 99 de la Indy 500, el piloto del Team Penske, tuvo que sufrir en primera instancia tras un daño en el alerón trasero de su monoplaza que lo relegó al puesto 30. Luego, el bogotano empezó a sobrepasar rivales hasta llegar al puesto 15 en donde luchó y mostró su casta de gran piloto. Fueron pasando las vueltas en Indianápolis y cuando faltaban 25 giros, ya se encontraba dentro de los tres primeros y ese espíritu combativo que lo caracteriza, hacía prever una victoria del colombiano en esta mítica carrera.
El final fue trepidante: Montoya, Dixon y Power se turnaron la punta vuelta a vuelta hasta que Juan Pablo Montoya, faltando dos giros, lanzó un feroz ataque que Dixon y Power no pudieron sostener .
De esta forma Montoya ganó por segunda vez la Indy 500; su primer triunfo fue en el 2000 cuando era parte del Chip Ganassi Racing Team.
Al final el podio de la Indy 500 lo cerraron Will Power, segundo y Charlie Kimball, tercero.