Brasil siempre ha sido un mercado relevante para Toyota. Inició su actividad comercial el año 1958, mientras que en 1959 inauguró la primera fábrica en Sao Paulo para el ensamblado del Land Cruiser. Hoy la marca inaugura una fábrica de motores en el municipio de Porto Feliz, transformándose en la primera planta fuera de Japón en incluir los tres procesos de producción; vale decir, fundición, mecanizado y montaje, en un mismo lugar.
La nueva planta implicó una inversión de USD 170 millones y generará aproximadamente 320 puestos de trabajo directos en la región, en un terreno que cubre un área de 872.500 m².
La nueva fábrica de Porto Feliz es la primera planta de motores de Toyota en América Latina y tiene la capacidad de producir hasta 108.000 unidades anuales. La empresa confirmó que producirá los motores de 1.3 litros y 1.5 litros equipados con Dual VVT-I, cuatro cilindros y Flex Fuel (en el que etanol es mezclado con nafta). Estos motores son los mismos que utiliza el Etios, fabricado también en Brasil.
“Toyota mantiene su compromiso con el desarrollo de la región latinoamericana, y esta nueva planta demuestra que estamos poniendo todo de nuestra parte para ayudar a estimular la economía de la región. Además de nuestras operaciones en Argentina, Brasil y Venezuela, ésta nueva fábrica de motores es una prueba de la estrategia a largo plazo de Toyota para colaborar en el surgimiento de Latinoamérica y el Caribe como poder económico global en las próximas décadas”, indicó el CEO para Latinoamérica y el Caribe de Toyota Motor Corporation y Chairman de Toyota do Brasil, Steve St. Angelo.