Con un promedio de 81,31 puntos, (lo que equivale a una medalla de oro) la Chery Tiggo 7 fue reconocida en por la C-ECAP por su performance ambiental, lo que le vale el título de uno de los modelos más amigables con el medio ambiente del segmento de SUV, al menos en China.
La certificación está basada en la medición de los indicadores de rendimiento en cuanto a contaminación, ahorro de energía y protección del medio ambiente. En la evaluación, la SUV aprobó satisfactoriamente los cinco indicadores analizados, que son el consumo general de combustible, las emisiones de gases de escape, la calidad del aire interno, el ruido dentro del vehículo y la emisión de sustancias peligrosas.
Este modelo equipa un motor 1.5L Turbo de 152 CV. La eficiencia térmica es del 37,1%, ocupando el primer lugar las marcas chinas. Su plataforma T1X, aliviana alrededor de 150 Kg, bastante si lo comparamos con sus competidores del mercado. Con esto se afianza la economía de combustible, además de un sistema de post-tratamiento de los gases de escape que se ha convertido en un nuevo estándar de ahorro de energía y reducción de emisiones.
En el proceso de fabricación, la Tiggo 7 ha eliminado todo tipo de materiales cancerígenos como el amianto y los hidrocarburos aromáticos policíclicos. Además, el interior poseé la función de filtrado, capaz de purificar el aire del habitáculo para asegurar un ambiente libre de gases tóxicos a los ocupantes.
En resumen, es una SUV que viene a intentar derribar el mito de la relación China-polución... ¿será este el camino que sigan otras marcas del gigante asiático?