Tras dejar la Fórmula 1 hace ya más de cinco años, Rubens Barrichello no solamente continúa con su labor de piloto en Brasil, sino que también participa en el programa de televisión Acelerados, siendo uno de los probadores de vehículos deportivos y clásicos, entre otros.
La última aparición del ex piloto de Ferrari fue junto a un coche de Stock Car, categoría brasileña en la que compite y donde se coronó en 2014. Tras dar unas vueltas al circuito de Velo Citta con el bólido especialente preparado para la ocasión, fue acompañante de su hijo Eduardo, de apenas 16 años. Las emociones, que no tardaron en llegar, hicieron que Rubinho rompiera en llanto ni bien Dudu (tal como se lo conoce a su hijo mayor) inició la prueba a bordo del Chevrolet Cruze preparado para la categoría.
"Fue uno de los días más emocionantes de mi vida. Mis inicios de mi carrera deportiva, mi padre, todo vino a mi mente en ese momento. Fue mucho para mí", aseguró Barrichello, de 45 años, en la red social Instagram.
Una vuelta emocionante
Fuente: CORSA