Con la llegada de la 12a generación del Toyota Corolla, el nuevo capítulo del auto más vendido del mundo no solo se destaca por sus innovaciones en desempeño, diseño, equipamiento y seguridad, sino que también por obtener una versión híbrida y una deportiva.
Este nuevo Corolla ya se lanzó en Brasil y está llegando a nuestro país en algunos días en su versión sedán. Lo que no sabemos si alguna vez llegará el nuevo integrante de la familia: el Corolla GR-Sport, un hot hatch desarrollado por la división deportiva Gazoo Racing, que acaba de hacer su debut mundial
Lo primero que llama la atención es el trabajo mecánico. A diferencia de sus competidores más directos, que recurren a motores turbo, el Corolla GR-Sport usa un sistema híbrido, compuesto por un motor naftero de 2.0 litros y un motor eléctrico, que en conjunto entregan 184 caballos.
No obstante que esta cifra no alcanza para definirlo como un auténtico hot hatch al estilo del Renault Mégane RS, Ford Focus RS, Honda Civic Type R o Volkswagen Golf R, el Corolla GR-Sport está más enfocado en ofrecer una dinámica de conducción deportiva y cómoda.
Para ello, Toyota Gazoo Racing hace uso de una suspensión adaptativa -de manera opcional- que varía la respuesta y la rigidez de los amortiguadores en función del estado del asfalto y el estilo de manejo. Actúa en sólo 20 milésimas de segundo y es capaz de variar la posición de los amortiguadores en 650 posiciones diferentes.
Además de la suspensión y el sistema híbrido, el Corolla GR-Sport se diferencia del Corolla “normal” por el trabajo de la dirección, transmisión y los elementos aerodinámicos y estéticos. A simple vista, es posible reconocerlo por la parrilla en negro, los faldones laterales, el difusor, las salidas de escape, la pintura bitono y las llantas de 18 pulgadas.
En el interior, el GR-Sport sobresale por los asientos deportivos con refuerzos laterales y tapicería mixta, así como por las costuras en negro y rojo del cuadro de instrumentos, el volante y la palanca de cambio.