Esta semana se esperaba el anuncio de la apertura comercial con México, sin embargo Argentina pospuso por tercera vez la decisión, continuando así con la metodología de un comercio administrado entre ambos países en el sector automotriz.
Argentina se comprometió a desmantelar los aranceles en el comercio de autos con México en tres distintas ocasiones, pero luego solicitó una apertura parcial a través de cupos, primero en 2011, luego en 2015 y finalmente en 2019. El anuncio se produce en un contexto en el que los presidentes de México y Argentina acordaron a finales de febrero pasado iniciar negociaciones para alcanzar un acuerdo comercial integral.
Los motivos
Como suele pasar con las aperturas comerciales, muchas veces la parte más beneficiada es la que tiene la economía más robusta, que en este caso es México. Los argumentos del lado argentino vienen por la falta de dólares para la importación de autos mexicanos, sumado al hecho que las automotrices locales no pueden hacerle frente en materia de competitividad a la industria mexicana.
Lo que sigue
El nuevo Ford Bronco Sport es una de las estrellas de la industria mexicana.
Como parte del último acuerdo bilateral automotriz, a partir del 19 de marzo de 2019, el cupo en el comercio de autos entre México y Argentina tuvo un incremento anual de 10% el primer año, 5% el segundo año y 5% el tercer año. Una vez concluido este periodo de transición, el libre comercio en autos entraría en vigor en marzo de 2022, tras el otorgamiento recíproco de un arancel de cero a las cuotas de exportación de vehículos anuales.
En la última década, las exportaciones de autos desde México al mercado argentino cayeron desde un máximo de USD 854 millones en 2012 a USD 68 millones en 2019, el monto más bajo desde 2005. A su vez, las exportaciones de automóviles desde Argentina al mercado mexicano fueron de sólo USD 29 millones de dólares en 2018, pero aún así fueron el máximo valor en la última década.
Esto habla a las claras de la desigualdad en la balanza comercial de ambos mercados, por lo que seguramente se espere a que se normalicen los números para abrir el comercio.