En 1983 salió a la luz el FIAT Uno, hatchback que resultó toda una novedad para la industria automotriz, y que marcó la vida de miles de argentinos. A cuarenta años de su nacimiento, nos adentramos en aquel inicio, donde llamó la atención de propios y extraños, pero no solo por su éxito de ventas, sino también por los desarrollos llevados a cabo para su diseño y producción. Además, repasamos su historia en Argentina, donde supo producirse.
FIAT Uno: Inversión y producción
Para llegar a producir el FIAT Uno, la marca italiana trabajó durante cinco años en investigación y desarrollo, con un presupuesto que alcanzó al billón de liras italianas, siendo la mayor inversión en un vehículo que había realizado la marca hasta ese momento.
La gran novedad de la fabricación del Uno fue su proceso de automatización robótica. Se dio a partir del Robogate, sistema de soldadura por puntos que trabajaba en cualquier pieza del vehículo. Presentes en las áreas de montaje, soldadura y revestimiento, los robots permitieron mejorar la calidad de la producción en serie.
Roberto Giolito, diseñador y líder de Stellantis Heritage, afirmó: “El Uno fue un proyecto completamente innovador, comenzando por su carrocería, que fue diseñada para ser fabricada con soldadura robótica”. Una de las consecuencias fue que “las puertas se ensamblaron con menos componentes, y el nuevo portón trasero también eliminó la línea de soldadura que se percibía como un defecto”.
FIAT Uno: Diseño
Lanzamiento del FIAT Uno en Cabo Cañaveral (EE.UU.), en enero de 1983.
El diseño del Uno también fue singular. Su proceso creativo no estuvo protagonizado por mesas de dibujo, sino por computadoras. Gracias al uso de estaciones de trabajo CAD, se mejoró la precisión y se redujo el margen de error a cero. Por otro lado, se estrechó el vínculo entre el Centro Stile (estilo) y el área de ingeniería, con el fin de lograr piezas estéticamente agradables pero también sumamente funcionales.
FIAT Uno: Motor FIRE
En materia motriz, el Uno fue el primer modelo en utilizar el motor FIRE de FIAT, que también se creó a través del sistema Robogate. Se trató de un impulsor que, comparado a los empleados por la marca hasta ese momento, resultó más compacto y liviano (pesaba solo 69 kg.), más simple (95 componentes menos), más moderno (árbol de levas a la cabeza en reemplazo de un sistema de varillas y balancines), más fíable y más sencillo de colocar.
El motor FIRE, denominado de esa manera por ser el acrónimo de Fully Integrated Robotized Engine (“Motor Robotizado Completamente Integrado”), se fabricó desde mediados de los 80 y durante 35 años, e impulsó a más de 23 millones de unidades en todo el mundo.
FIAT Uno: En Argentina
El FIAT Uno no solo se vendió en Argentina, sino que también se fabricó. Su producción comenzó en 1989, en la planta que la por entonces SEVEL poseía en El Palomar. Luego, en 1995, la fabricación se trasladó a Córdoba, al pasar a estar bajo el ala de FIAT Argentina. Allí permaneció hasta su fin, en 2004. En quince años, se produjeron en el país cerca de 180.000 unidades.
En las últimas décadas, el Uno se comercializó en Argentina proveniente de Brasil, hasta que en 2021 dejó de venderse en el país vecino, cerrando su actividad con el Uno Ciao, edición especial lanzada hacia finales de aquel año, y que no llegó a nuestro país.