En 2003 Luiz Inácio Lula da Silva, por entonces presidente de Brasil, visitó la planta de Volkswagen en Anchieta, y durante el evento, directivos de la marca lo “sacaron a pasear” en un Polo sedán (el de allá, no el hecho en Pacheco). Veinte años después, se repite el evento, pero con un Virtus sin techo.
El Virtus es el sucesor de los Polo sedán, ya que es la versión sedán (y con distancia entre ejes alargada) del actual hatchback, con el que comparte la plataforma MQB A0.
La versión convertible del modelo fue creada especialmente por los ingenieros de VW en Brasil, pero curiosamente esta carrocería lleva el nombre de phaeton, y no hay que confundirla con el sedán que fue tope de gama de Volkswagen entre 2003 y 2016.
El paseo de Lula se remonta a un momento histórico mucho más lejano, cuándo el presidente Juscelino Kubitschek hizo su recorrida en un VW Escarabajo convertible en 1959.
En esta ocasión, el auto y el paseo se hicieron para celebrar la mega inversión de 3.300 millones de dólares hasta 2028 que anunció Volkswagen en Brasil para producir hasta 16 lanzamientos, modelos híbridos y que finalmente llevaría a la producción a la Tarok o como se llame la pickup SUV anti Toro de la marca alemana.