La llegada de Lewis Hamilton a Ferrari en 2025 viene siendo noticia en el automovilismo hace días, y le dio vida a la temporada baja de la Fórmula 1; y ahora, hay reportes de que la Scuderia Ferrari hipotecó hasta los post-it para tener al siete veces Campeón del Mundo en su equipo.
Según se dice, el contrato de Hamilton con Ferrari será por dos años, con opción a un tercero, y se rumorea que si luego del primer año no queda satisfecho, puede rescindir del contrato e irse a otro equipo. Ferrari lo quería a toda costa, tanto que le pagará una fortuna.
Si bien no hay números precisos, diversos medios informan que el británico ganaría entre 60 y 100 millones de euros por año. Actualmente, Hamilton en Mercedes gana 55 millones, y es el segundo piloto mejor pago de la actualidad, detrás de Max Verstappen, que cobra 70 millones.
Si bien los números reales aún no se conocen, se habla de un salario fijo de 80 millones anuales, a los que le podrá sumar otros 20 millones por bonificaciones, resultando en 100 millones de euros, que lo volverían el deportista mejor pagado del mundo.
Además, se afirma que John Elkann, presidente de Ferrari y el Grupo Stellantis, y CEO de Exor, le prometió al inglés una inversión de 250 millones de euros para su fundación "Mission 44" y otros proyectos personales, y podría llegar a ampliarse hasta los 400 millones. La plata saldría de un fondo de la firma familiar Exor.
El año pasado, cuando Hamilton estaba negociando su nuevo contrato con Mercedes, trascendió que el inglés quería tener un contrato casi vitalicio con el fabricante alemán, que le permitiera convertirse en embajador y asesor de la marca luego de su retiro, pero fue rechazado y sólo recibió un contrato por tres años, hasta 2026.
Parece que la "torta de plata" que puso Ferrari arriba de la mesa sí le dio la certeza a largo plazo que estaba buscando el inglés.