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Automovilismo

Matías Rossi campeón del TC2000 2025 con un Corolla Cross

Una carrera de tensión extrema, un Toyota Corolla Cross GR-S que resistió y un final que rescribió la historia.

Matías Rossi campeón del TC2000 2025 con un Corolla Cross

El TC2000 cerró su temporada 2025 con el campeonato abierto hasta el último domingo, con un equipo oficial gestionando una definición entre compañeros y con un piloto que supo que el título, esta vez, no se ganaba atacando sino llegando. Ese escenario, cargado de tensión y cálculo, tuvo como escenario el autódromo de Junín, donde Matías Rossi se consagró campeón argentino tras finalizar tercero en la final que ganó Gabriel Ponce de León, y se convirtió en el primer campeón de la era SUV al mando del Toyota Corolla Cross GR-S del Toyota GAZOO Racing YPF INFINIA.

No fue una consagración simple ni lineal. Fue una definición atravesada por decisiones técnicas, tensión interna y por la convivencia –inevitable- de dos pilotos del mismo equipo, el propio Rossi y Emiliano Stang, llegando a la última fecha con chances reales.

quien es el campeón del tc2000

La definición no comenzó con la largada. Empezó el sábado, cuando el autódromo ya se vaciaba y en el box de Toyota apareció un dato que obligó a decidir: un inconveniente en el sensor de aceite del motor del auto de Rossi. En un fin de semana común, el cambio de motor se ejecuta sin debate; esta vez, con el líder del campeonato, la última fecha y dos pilotos del mismo equipo jugando el título, la categoría dejó la resolución en manos del equipo. Toyota eligió priorizar confiabilidad. El motor se cambió.

En ese contexto, Darío Ramonda resumía el clima exacto que se respiraba puertas adentro. Estaba la satisfacción de “tener ya en casa el campeonato de marcas y de equipo”, pero también la atención permanente que exige un box con “sus dos pilotos definiendo un título”. Por delante, apenas un deseo: que “todo se resuelva en la pista” y sin injusticias deportivas.

Para Rossi, esa noche no fue una más. La clasificación había mostrado que Franco Vivian estaba un paso adelante y que su Corolla Cross GR-S repetía el rendimiento del entrenamiento, con un sector dos que no había cerrado del todo. Pero el foco ya no estaba ahí. El domingo se encaraba con una idea fija, casi obsesiva: ver la bandera a cuadros. El planteo era directo y sin épica innecesaria: el auto debía ser confiable. Nada más. Nada menos.

LA CARRERA QUE DEFINIÓ TODO

qué pasó en el tc2000

La final arrancó con el escenario lógico. Stang largó desde la primera posición y tomó el liderazgo, sabiendo que no había margen para especular. Clasificar cuarto o sexto había sido anecdótico; el domingo lo encontraba obligado a ganar. “Tengo que ganar igual”, era la síntesis de su fin de semana. Todo lo demás dependía del resultado de Rossi.

El Misil largó con la calculadora en la mano. Si Stang ganaba necesitaba terminar entre los diez primeros. Era claro. Largó tercero, pero en la partida perdió en el mano a mano con Leonel Pernía, campeón saliente; y poco después también fue superado por Vivian, que largó sexto por la inversión de la grilla.

Pero todo cambió en la cuarta vuelta, cuando Stang lideraba y el campeonato todavía respiraba, el Toyota del pibe de 20 años comenzó a vibrar fuerte en la recta. Al frenar, el neumático delantero izquierdo se rompió. El golpe fue tan inesperado como cruel.

Pudo cambiar la goma y volver a pista. Con un ritmo firme y aprovechando tener neumáticos en mejor estado que el resto, avanzó hasta el cuarto lugar. Una remontada importante, aunque insuficiente.

qué pasó en el tc2000

El dato no fue aislado. La final quedó marcada por roturas de neumáticos en varios autos, en una tarde de calor intenso, asfalto abrasivo y la enorme carga aerodinámica de los SUV. La definición empezaba a jugarse más por resistencia que por ataque.

Desde ahí, Rossi entró en su carrera más incómoda. No contra los rivales, sino contra la ansiedad. Cada neutralización se vivía como un alivio; cada relanzamiento, como una amenaza. La atención se multiplicó en la medida que algunos de sus rivales quedaban a un costado por la rotura de la goma delantera izquierda, la que más sufría.

Cuidó los neumáticos al extremo, buscó aire limpio y evitó cualquier roce innecesario. Corrió lejos del espectáculo, pero siempre cerca del título. Y tuvo su premio…

Gabriel Ponce de León

Mientras Toyota administraba tensiones internas, Ponce de León ejecutó la carrera perfecta para el contexto. Había guardado neumáticos nuevos para la carrera, convencido de que con esta carga “las gomas iban a sufrir” en los curvones de Junín. El plan era llegar entero.

El problema temprano de Stang le abrió aire limpio; los relanzamientos, margen para estirar diferencias. La última vuelta la transitó con confianza, sin vibraciones y con buen “feeling”. Ganar en casa, con su gente, tenía un sabor especial. De esos que se guardan.

BANDERA A CUADROS: ALIVIO ANTES QUE FESTEJO

qué pasó en el tc2000

Rossi cruzó la meta en tercer lugar. Primero respiró. Después entendió. El campeonato estaba definido. Reconoció que había “sufrido las últimas instancias” y que, con tantas roturas de neumáticos, la atención fue “hasta el final”. El agradecimiento fue inmediato para el equipo y para su ingeniero, Diego Bruna, con quien compartió cada momento de tensión, sabiendo que podía escaparse “porque son carreras”, pero convencidos de que el trabajo había sido el correcto.

Stang terminó cuarto. Golpeado, pero entero. Aceptó el resultado, felicitó a su compañero y valoró haber llegado a la última fecha con chances reales. Confirmó, además, su continuidad en Toyota para 2026. La revancha ya tiene fecha.

UN TÍTULO QUE INAUGURA UNA ERA

Con este resultado, Rossi alcanzó su sexto título en el TC2000 (2006, 2007, 2011, 2013, 2020 y 2025) y quedó a solo uno de igualar la marca histórica de Juan María Traverso. Pero más allá de los números, Junín quedará como el lugar donde la era SUV encontró a su primer campeón.

No fue una consagración ruidosa. Fue una definición pensada, trabajada y resistida. De esas que no se ganan atacando, sino llegando.

 

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