Este "auto del futuro" salió a la luz en el Salón de Tokio de 1991. Contaba con una carrocería de aluminio como el quattro Spyder que se develó en Frankfurt, pero con un motor de 12 cilindros en W de 6.0L que le daba una potencia de 509 caballos de fuerza, acoplado a una transmisión automática de cuatro velocidades que le permitía acelerar de 0-100Km/h en 3 segundos. Su velocidad máxima era de 340 Km/h y tenía un peso de 1.250 kilogramos.
Un detalle muy importante del Audi AVUS se encontraba en su dirección integral, ya que las ruedas traseras giraban a la par de las delanteras y al dar marcha atrás, se invertía el proceso para estacionar sin problemas. Se le denominó AVUS como homenaje al autódromo del sur de Berlín, lugar en el que se realizaban las competencias de Auto Union antes de que estallara la Segunda Guerra Mundial y donde se realizó el Gran Premio de Alemania de Fórmula 1 en 1959.
El Audi AVUS tenía una cabina similar a la del Bugatti Veyron, ayudó al desarrollo del Audi A8 (en la carrocería) y el diseño de sus llantas pasó la prueba para darle el toque de elegancia y distinción a los S3 y S4.
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