Este Beetle Turbo R, es en realidad la edición especial GSR que debutó en el Salón de Chicago de 2013 y está limitada a 3.500 unidades de las seguramente ninguna llegue a nuestro país. Sin embargo, vale la pena saber hasta dónde puede llegar el nuevo Beetle que se está presentando en Argentina.
Mecánica y seguridad
Bajo el capot de este Beetle Turbo R tenemos un motor de cuatro cilindros y 2.0 litros TFSI que entrega 210 CV y 280 Nm de torque, acoplado a una transmisión DSG de seis velocidades. La dirección es de asistencia eléctrica y la suspensión es McPherson adelante y multibrazo atrás.
En seguridad ofrece airbags frontales y laterales, ABS, Control de Tracción ASR, Asistente de arranque en pendientes HHC y sistema de bloqueo electrónico de diferencial EDL.
Disño
Más allá de las características del nuevo VW Beetle que luce más masculino que el anterior gracias a su techo plano, el Turbo R suma pintura bitono con el capot, techo y baúl en negro, mientras que el resto de la carrocería es amarilla. Las llantas de 19 pulgadas también muestran dos tonos, negro y aluminio pulido. Por último en los costados hay unas franjas delgadas con la leyenda Turbo R.
Interior
En la cabina encontramos asientos deportivos R-Line con forro bitono en tela y microfibra con los pespuntes en amarillo. El volante multifunción forrado en cuero también cuenta con costuras amarillas y en la base una placa que nos indica el número del total de 3.500 que es nuestra unidad.
En equipamiento podemos encontrar cristales y espejos eléctricos, techo solar, interfaz Bluetooth para el teléfono celular, entrada Aux. y cable dedicado para iPod, control de velocidad crucero, pantalla táctil de 6.5 pulgadas y computadora de viaje.
Por lo que hace a la habitabilidad, los pasajeros de la primera fila viajarán sin ningún inconveniente y aunque el espacio para el banco posterior es mucho mejor en este Beetle, en relación con su predecesor, lo cierto es que un adulto de talle medio viajando atrás sentirá muy cerca la luneta.
Comportamiento dinámico
Tras el volante, lo primero que se nota es un ajuste de suspensiones firme, la transmisión también muestra una clara orientación a la deportividad, con relaciones cortas y en términos generales una tendencia a aguantar bastante los cambios. Al Beetle Turbo R le gusta mantener el motor girando a medio régimen con el objeto de tener disponible una pronta reacción a la primera insinuación de nuestro pie derecho. Como buena caja DSG las transiciones entre las distintas relaciones son rapidísimas.
El motor por su parte, el viejo conocido 2.0 litros turbo de inyección directa, presenta turbo lag en baja rotación, pero una vez que se llena la turbina, las aceleraciones son contundentes. La dirección es comunicativa y se agradece mucho el diseño del volante de empuñadura delgada que resulta mucho más cómodo.
En el terreno de la eficiencia de combustible, lo mejor que pudimos lograr fue en el orden de los 12 – 13 km/l y siendo muy cuidadosos con el acelerador, sin embargo, cuando pasamos la transmisión a modo Sport y sacamos todas las virtudes de ese pequeño demonio que habita bajo el capot, el rendimiento puede caer por debajo de los 9 km/l con mucha facilidad.
Conclusiones
El Volkswagen Beetle Turbo R es la variante más extrema disponible por el momento y es más que probable que no la veamos nunca en Argentina; sin embargo, sirve para conocer las capacidades del nuevo Beetle que está llegando al país.