La inclusión de un sistema de transporte público eléctrico de superficie es una deuda pendiente de la Ciudad desde que se dejó de utilizar el sistema de Tranvías, allá por el año 1963. Pasaron los años y el parque automotor urbano demostró un acelerado y constante crecimiento, con la consecuente demanda de una mejor infraestructura para mitigar los embotellamientos y una creciente contaminación (ambiental y sonora) en los lugares más transitados.
En muchas ciudades del mundo se utilizan programas de alquiler de vehículos eléctricos, incluso en nuestro continente está el ejemplo de las ciudades de México o de Bogotá, donde actualmente opera una flota de 50 taxis eléctricos de la marca china BYD. Sin embargo, en nuestro país la oferta de este tipo de vehículos recién ahora está empezando a establecerse, con Zanella homologando la primer moto eléctrica de Argentina y Renault probando las Kangoo Z.E., sin contar a marcas como Toyota, que ya desde hace unos años ofrece su híbrido por excelencia, el Prius (ver prueba).
Con la intención de dar el puntapié inicial en el despegue de la movilidad eléctrica pública, el subsecretario de Transporte porteño Guillermo Dietrich anunció a través del diario La Nación la intención del Gobierno de la Ciudad de poner en marcha un sistema de arrendamiento de vehículos eléctricos en el macrocentro porteño. El esquema sería similar al actual programa de EcoBicis, con centros de alquiler en sitios determinados pero en este caso con lugares exclusivos para el estacionamiento de este tipo de vehículos.
Según Dietrich, este plan se desarrollará luego de que se finalice la automatización del sistema EcoBici, proyectado para el 2015. Por lo tanto, para que este proyecto se ponga en marcha será necesario que la próxima gestión tome la posta.
Sobre su funcionamiento y aplicación, el funcionario agregó: "Hay una tendencia creciente en muchas ciudades en cuanto al uso del carsharing; en los últimos años, el alquiler de autos eléctricos ganó mucho terreno. Ante los problemas actuales de congestionamiento en el tránsito, venimos estudiando este tema con mucha profundidad y es perfectamente aplicable en una ciudad como Buenos Aires. Con respecto a su funcionamiento, el usuario pagará por kilómetro recorrido valiéndose de sistemas sofisticados, de forma tal que la persona que alquila uno de estos vehículos hasta podrá reservar un lugar para estacionar en lugares que serán delimitados exclusivamente para estos autos".
Reemplazar el parque automotor de uno de los lugares más congestionados del país por vehículos eléctricos sería un paso determinante hacia una mejora en la calidad ambiental de la ciudad, aunque por lo pronto no solucionaría el problema del tránsito. La solución parece pasar por hacer más eficientes los sistemas masivos de transporte a la vez que se debe incentivar a que la movilidad individual se resuma a bicicletas y (por qué no) motos eléctricas.
