Según la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA), poseer un sistema personal para medir alcoholemia sería un sistema que de manera potencial podría salvar millones de vidas al año.
Debido a esto, Honda y Hitachi desarrollaron el prototipo de un detector de alcohol resistente a la manipulación que es simple y de uso diario por lo que puede ser integrado en una llave inteligente.
El aparato es capaz de detectar el vapor de agua saturado a partir de la respiración y mide los niveles de alcohol en un lapso no mayor a tres segundos. Si detecta que el conductor está bajo la influencia de este tipo de sustancias, el auto se bloquea impidiendo el encendido y arranque del motor.
El valor agregado que tiene este sistema comparándolo con los ya existentes, es que no requiere que el conductor haga la prueba desde el asiento del piloto, pudiendo realizarla incluso desde afuera del auto, pudiendo reconocer si el aire aplicado es aliento real.
A la par del desarrollo del detector de alcohol, también se implementó un sistema que pueda mostrar el nivel de alcohol medido en el panel del auto.