Ya se sabe que una de las estrellas del próximo Salón de París será el nuevo Citroén C3, pero además, la marca de los dos chevrones liberó la información del CXperience, un concept de 4.850 mm de largo y 2 metros de ancho, que podría ser la inspiración para el próximo C5.
El Citroën CXperience Concept muestra un diseño aerodinámico, con trazos suaves y uniformes que crean una línea sobria y elegante, en una agresiva silueta de hatchback alargado tipo coupé que sumada a la altura de solo 1.370 mm le da el efecto de un shooting brake.
En el frontal se destacan los grupos ópticos en forma de V complementado con tres luces LED direccionales. Los chevrones bien marcados resaltan la anchura del modelo, mientras que en el paragolpes se instalan tomas de aire activas para mejorar los flujos de aire y el Cx. Rematan las puertas traseras de apertura tipo suicida, que permiten generar una gran abertura de acceso al interior gracias a la ausencia de un pilar central.
El Citroën CXperience Concept no tiene espejos laterales, sino cámaras, que muestran sus imágenes en pantallas ubicadas en el interior de las puertas, e incluye la Connected Cam que debuta en el C3, permitiendo grabar imágenes que se pueden compartir en las redes sociales.
En el interior, el volante tiene un solo brazo, un guiño a la historia de la marca junto con el nombre CX, mientras que el tablero de instrumentos flotante es de diseño horizontal y tiene un aspecto tridimensional. Hay madera, cuero y tejidos entre los materiales, y en el centro de la consola se destaca una pantalla rectagular de 19" desde donde se controla todo el auto y que puede ofrecer de manera independiente información o imágenes tanto para el conductor como para el acompañante. Además, los asientos envolventes incluyen una serie de parlantes y micrófonos en los apoyacabezas, que permiten invidualizar el sistema de sonido.
El CXperience concept está motorizado con un sistema híbrido compuesto por un motor naftero de entre 150 y 200 CV asociado a un motor eléctrico de 80 kW (110 caballos) que envía la fuerza al eje trasero, consiguiendo así 300 caballos totales y motricidad en las cuatro ruedas. En modo 100% eléctrico, el modelo ofrece hasta 60 km de autonomía y la batería, instalada bajo el piso, se puede cargar en dos horas y media. Este sistema incluye una caja automática de ocho cambios instalada en posición transversal entre ambos motores, mientras que el CXperience incorpora la nueva suspensión de amortiguadores hidráulicos progresivos de módulo avanzado, que fue presentada hace sólo unos meses por la marca.