Honda se mete de lleno en el año 2018, específicamente, en el mercado de las motos. La marca japonesa lanza al mercado dos modelos que completan el portfolio de la marca en el segmento super-sport. Se trata de la Honda CBR300R y el comienzo de comercialización de la CBR1000RR.
Con raíces en el MotoGP, la CBR300R cuenta con una transmisión de 6 velocidades y motor monocilíndrico de 4 tiempos, 4 válvulas, DOHC y refrigerado por líquido. La moto se destaca por su maniobrabilidad, frenos ABS y su comportamiento netamente deportivo.
Por otro lado, la CBR1000RR poseé dos versones, y resalta por ser más ligera, potente y con un motor DOHC refrigerado por líquido. Tiene suspensión delantera de horquilla telescópica y trasera de forma basculante de doble brazo con monoamortiguador hidraulico y resorte helicoidal. Además, la versión CBR1000RR S1 está equipada con un sistema de frenos Brembo de 4 pistones y suspensión Ohlins.
Los dos modelos ya se encuentran en los concesionarios de la marca, formando parte del segmento super-sport y de la apuesta integral de la marca nipona.