En las dos semanas que la Fórmula 1 se hizo presente en Barcelona, donde llevó a cabo los ensayos de pretemporada, todos los pilotos de la categoría giraron en más de una ocasión con el Halo, elemento de seguridad que se instaló en los monoplazas a partir de esta temporada.
Su uso recibió críticas por parte de algunos pilotos, como Kevin Magnussen (Haas), quién lo calificó de “feo y molesto”, ya que “hace que sea difícil entrar y salir del auto y poner y sacar el volante”. Además, aseguró que su uso le genera dudas en curvas como Eau Rouge, en la cual “si estás persiguiendo a alguien no podrás ver si comete un error en la parte alta o si hace un trompo mientras vas por la parte media”.
Al ser consultado por los dichos del danés, Jean Todt, presidente de la FIA, se mostró “sorprendido”, porque “fueron los mismos pilotos los que pidieron la implementación del Halo”, tal como aseguró en una conferencia de prensa realizada en Londres.
“A finales de 2015, recibí una carta firmada por los directores de la Grand Prix Drivers Association (N. de la R.: organismo que nuclea a los pilotos de la Máxima), Jenson Button, Sebastian Vettel y Alex Wurz, instándonos a implementar un sistema de protección para la cabeza de los pilotos”, explicó Todt.
Además, el francés agregó que “en julio de 2016 los pilotos nos dijeron que respetáramos lo que nos habían pedido. Así que nos comprometimos a hacerlo”. “Nosotros lo hemos respetado, pero algunos tienen memoria corta”, aseveró el ex director de Ferrari, en franca disidencia con lo expuesto por Magnussen.
Por otro lado, Todt respondió a las críticas “inapropiadas” que según él realizó Toto Wolff, director de Mercedes. En su momento, el alemán manifestó que “cortaría el Halo con una motosierra”, debido a que lo considera “antiestético”. En contraposición, Todt señaló que “no es apropiado negar públicamente algo que se implementó. Para mí, la crítica constructiva siempre es buena, pero esta crítica pública no lo es, por lo que no le doy valor”.
Dejando de lado lo comentado por Magnussen y Wolff, quien preside la FIA desde 2009 se mostró conforme con haber implementado el Halo: “Para mí no es un problema. Me sorprende oír a algunas personas decir que el automovilismo tiene que ser peligroso y que, si pasa un accidente fatal, pasa y punto. Pero si podemos evitarlo, ¿por qué no deberíamos proteger la vida de quien sea?", expresó, antes de asegurar que “el ser humano de por sí es reacio al cambio, pero una vez que sabemos que es para bien, después de mucha experiencia y muchas pruebas, debemos implementarlo”.
Fuente: CORSA