Aunque el mercado de los autos eléctricos está en estapa temprana, es un hecho que en un futuro cercano crecerá gracias a que los precios serán más bajos, la autonomía será mayor y los tiempos de recarga más cortos. Esta tendencia por la movilidad eléctrica no sólo es pronosticada por la industria, sino que también los clientes que creen que el futuro estará dominado por los automóviles cero emisiones.
Según una encuesta realizada por The Harris Poll encargada por Volvo Cars, casi tres cuartas partes de los conductores estadounidenses creen que los vehículos eléctricos son el futuro de la movilidad.
Para comprender mejor el impacto de esta tendencia, la investigación se propuso explorar las percepciones de los conductores sobre los vehículos eléctricos y saber cómo perciben estos autos, sus experiencias de manejo, beneficios y desafíos diarios.
Este informe indica una serie de experiencias positivas que los automovilistas asocian con los autos eléctricos, específicamente en lo que respecta a los beneficios económicos y los impactos ambientales:
- 74% declara que los ahorros a largo plazo en nafta superan el precio más alto de comprar un vehículo de esta clase.
- 59% de todos los conductores sienten que conducir un auto eléctrico tiene un impacto ambiental positivo.
Igualmente, el informe indica que los conductores de vehículos eléctricos están altamente satisfechos, pero aún existen varias barreras relacionadas con la comodidad que enfrentan. Por ejemplo, anhelan opciones de carga más convenientes cuando están en movimiento.
Aunque el lugar más común para que los conductores de vehículos eléctricos recarguen sus vehículos es en casa (51%), muchos también cargan sus vehículos cuando están fuera de ella. A pesar de cargar sus vehículos en estaciones públicas casi la mitad del tiempo, la mayoría dice que las estaciones de carga dejan mucho que desear: más de un tercio (36%) dice que la experiencia de usar estaciones de carga públicas lleva mucho tiempo.
- Los conductores de autos eléctricos desean actualizaciones a las estaciones de carga públicas, que incluyen:
- Opción de pagar más por una carga más rápida (48%)
- En bares (42%)
- En gimnasios (32%)
- Un sistema de recompensa que incentiva su retorno (27%)
- Servicios de mantenimiento (26%)