Las katanas son los sables que tradicionalmente eran portados por los antiguos guerreros samurái. Bellas, letales y enigmáticas, estas espadas son veneradas en diferentes partes del mundo, por ello, no resulta raro, que hayan servido de inspiración para la creación de la Suzuki Katana, una legendaria moto deportiva, que es un icono para la marca.
¿Y que tienen que ver una moto con todo esto? En realidad, Suzuki ha querido llevar esta leyenda más allá de las dos ruedas y por ello presenta el Swift Sport Katana, que, por alguna extraña razón, es una edición limitada a 30 unidades que sólo está disponible en los Países Bajos.
Para que el homenaje quede claro, este Swif Sport Katana sólo puede adquirirse en los colores plateado (Premium Metallic) y negro (Super Pearl), mismos tonalides que tiene de la moto. Otros elementos alusivos son la franja roja alrededor de la parrilla, gráficos alusivos en las puertas (con su respectivo kanji Katana), así como el número de serie en los postes C, esto sin olvidarse de las llantas OZ de 18" con los neumáticos Michelin Pilot Sport 4.
En el interior, las novedades se limitan a un volante más grueso, así como asientos y tapizados deportivos con la insignia “Katana” y su respectivo número de serie. De ahí, en más, permanece prácticamente igual a cualquier Swif Sport “normal”.
Aunque el motor de 1.4 L Boosterjet se conserva inalterado, produciendo los mismos 138 CV y 230 Nm de torque, Suzuki ha dotado al Swif Sport Katana de algunas mejoras como una suspensión más baja, así como un sistema de escape mejorado. La transmisión es la conocida manual de sexta.
Sin duda, es una pena que esta edición especial traspase fronteras, ya que los cambios lucen bastante interesantes. Pequeño y letal, así es el Suzuki Swif Sport Katana, el vehículo ideal para Beatrix Kiddo (de Kill Bill).