Ante las violaciones cometidas en los registros de las emisiones contaminantes de sus modelos gasoleros, Daimler recibió una multa de 870 millones de euros (USD 957 millones) por parte del gobierno alemán.
De la misma manera que ocurrió con Volkswagen, Audi y Porsche, las autoridades alemanas descubrieron que ciertas unidades del Mercedes-Benz Clase C y Clase E con motores diésel equipaban un software que alteraba las emisiones de contaminantes. Esto hizo que el fabricante germano se viera obligado a retirar 280.000 vehículos de los modelos mencionados
Luego de ser notificado que recibiría una sanción de casi USD 1.000 millones, Daimler mencionó que no apelará la multa, que es de más de USD 3.500 por vehículo alterado. Igualmente, esta multa pone fin a la incertidumbre legal que rodea a la empresa con sede en Stuttgart.
Luego de cerrar este capítulo, ahora, Daimler enfrenta un escrutinio regulatorio por parte de las autoridades de Estados Unidos, luego de que, en febrero de 2016, la Agencia de Protección Ambiental, le pidiera a Mercedes-Benz que explicara los niveles de emisiones en algunos de sus autos gasoleros.