En 2017 Geely rescató a Lotus y a Proton de los problemas económicos, al adquirir el 51% de la firma de deportivos británicos y el 49,9% de la malaya. Desde entonces, Geely y Lotus empezaron a trabajar en el desarrollo del Lotus Evija, próximo a convertirse en el modelo de producción en serie más potente del mundo con casi 2.000 CV y también en el primer auto 100% eléctrico de la marca con pasado en Fórmula 1, mostrando así la influencia del conglomerado chino.
Más allá del proyecto que marca su ingreso en la industria eléctrica, Lotus tiene la idea de cerrar el ciclo de los motores de combustión con la fabricación de un último modelo, según sostuvo el CEO de la marca, Phil Popham, y cuyas declaraciones replicaron nuestros colegas de Automotive News Europa. El plan de la marca es colocarlo como el deportivo de acceso a la gama, tal y como lo era el Elise hace algunos años, con pretenciones de lanzamiento para 2021.
Lamentablemente, Popham dio a conocer solo un detalle más: el nuevo modelo compartirá un diseño un tanto similar al del Evija, pero con un interior más amplio para ofrecer la comodidad de un vehículo de uso diario.
