El Gobierno de Francia estableció un presupuesto de USD 1.43 mil millones para incentivar la compra de vehículos eléctricos, con el que esperan reducir su precio de venta en un 40%.
Los usuarios pueden llegar a recibir hasta USD 13.000 en subsidios, lo que hace de este plan el más generoso en la Unión Europea. Por ejemplo, adquirir un Renault Zoe cuesta USD 35.000, pero con el apoyo gubernamental su precio bajaría hasta los USD 22.000 ¡Nada mal! ¿No te parece?
“Este es un plan acorde a la situación histórica que estamos viviendo” declaró el presidente francés Emmanuel Macron, tras señalar que los incentivos integran los USD 8.8 mil millones de la estrategia armada por el Gobierno para rescatar a la industria automotriz local. En este sentido, otra parte del plan son los USD 5.000 de bonificación que un usuario puede recibir si se deshace de su auto con motor de combustión y adquiere uno eléctrico o híbrido.
Macron señaló que el objetivo es que para 2025 Francia produzca anualmente un millón de coches eléctricos. Para ello, tanto Renault como el Grupo PSA se comprometieron a incrementar su fabricación: el primero construirá dos nuevos eléctricos para 2022, mientras que el segundo incluirá en la nueva generación del Peugeot 3008 una variante completamente eléctrica.
Si comparamos con los demás países de la Unión Europea, integrantes del continente cuyas fábricas automotrices sufrieron y mucho la pandemia del Coronavirus, Francia es el primero en anunciar estos estímulos tendientes a levantar su industria. El segundo será Alemania, que revelará su plan durante junio.